- malo
- malo -la1. Adjetivo que significa, básicamente, ‘[persona] que no se comporta como debe, o que carece de bondad’: «Ha dicho que mi padre es malo y que se va a condenar» (GaMorales Sur [Esp. 1985]); ‘[alimento] de sabor desagradable’: «Muchas personas [...], acostumbradas a los guisos con aceite, encuentran malos los que se hacen con manteca» (Muro Practicón [Esp. 1891-94]); ‘[persona o cosa] de nula o escasa calidad, que no reúne las condiciones exigibles para cumplir bien su función’: «Más daño puede hacer un mal profesor que un buen presidente» (Nacional [Ven.] 7.1.97); «En mi familia es muy frecuente la mala letra» (Alfaya Traidor [Esp. 1991]); ‘enfermo’: «Uno de los niños se puso malo y se quedó un poco endeblillo» (Quiñones Noches [Esp. 1979]); y ‘nocivo o que causa disgusto’: «Fumar es malo» (Gironella Hombres [Esp. 1986]). Se apocopa en la forma mal cuando precede a un sustantivo masculino singular, aunque entre ambos se interponga otra palabra: mal presagio, un mal primer tiempo.2. Existen dos formas para el comparativo de malo:a) peor. Procede del comparativo latino peior y se usa en todos los sentidos de malo antes referidos: «Eres peor que un asesino» (Salisachs Gangrena [Esp. 1975]); «Había adquirido la fama de ser [...] uno de los peores profesores» (Volpi Klingsor [Méx. 1999]); «Cada día eran peores las noticias» (UPietri Visita [Ven. 1990]); «Tú sabes que es peor un bruto que un malo» (Posse Pasión [Arg. 1995]). En los sentidos de ‘[persona] que carece de bondad’ y ‘[alimento] de sabor desagradable’, alterna con más malo (→ b). El segundo término de comparación debe ir introducido por la conjunción que: «Separarse era una incomodidad peor que la de seguir viviendo como hasta entonces» (Martínez Vuelo [Arg. 2002]); o por la preposición de, si se trata de una oración de relativo sin antecedente expreso que denota, no una entidad distinta, sino grado o cantidad en relación con la magnitud que se compara: «Tendrás que soportar cosas peores de las que puedas imaginar» (Gasulla Culminación [Arg. 1975]). No debe emplearse la preposición a para introducir el término de comparación: ⊕ «Lamentó [...] que el estado de cosas en la Corte Electoral estuviese [...] peor a lo que estaba hace algunos días» (Vistazo [Ec.] 20.3.97); debió decirse peor de lo que estaba.b) más malo. Alterna en el uso con peor para formar el comparativo de malo en el sentido de ‘[persona] carente de bondad’: «Era la cola de la montada. Y más malo que Judas» (Asturias Hombres [Guat. 1949-53]). También es correcto su empleo para formar el comparativo de malo cuando se alude al sabor: «Tomaría todos los remedios calladita, hasta el más malo, sin protestar, todo lo que recetara el médico» (Bryce Mundo [Perú 1970]).3. Además de muy malo y malísimo, existe la forma superlativa pésimo, que presenta el significado enfático especial de ‘malo en grado sumo’: «No piense que tengo un gusto pésimo» (GlzLeón Viejo [Ven. 1995]). Al ser un superlativo absoluto, no admite su combinación con otras marcas de grado: ⊕ muy pésimo, ⊕ más pésimo.
Diccionario panhispánico de dudas. 2013.